.

DÍAS DE HIELO Y FUEGO

Días de Hielo y Fuego es la nueva novela de Rocío Ordóñez
Publicada por la editorial "Lapizcero"

domingo, 27 de diciembre de 2009

Como convencimos a Xavier...

Como convencimos a Xavier... el programa de radio de Castillos en el aire en el que presentamos a Xavier de Tusalle, editor de Lapizcero, la novela "Días de Hielo y Fuego"

C:\Users\Usuario\Desktop\programa-38-en-el-que-montamos-la.htm

Gracias, Javi, poe tu ayuda, sin la que esta novela puede que nunca se hubiera publicado.
Y gracias a Beatriz, la amiga enfermera de Valencia, a la que aún no conozco, que se enamoró de la novela y escribió una carta para convencer al editor.

sábado, 19 de diciembre de 2009

La llanura castellana



Castilla, vastas llanuras en las que se pierde la mirada. Castellanos de mirada profunda y escasas palabras.

Madrid



El Madrid típico, los madrileños chulos, petulantes, las mozas y los soldados, las morcillas, los entresijos, Madrid visto desde la mirada de un francés.

Goyescas, reyes pusilánimes y pueblo heroico.

El Molino




Es curioso, que cuando escribí la novela, no sabía que había molinos en Montmartre. Suponía que en algún sitio tendrían que moler la harina, pero cuando ví esta imagen, me sobresaltó. Es mi molino. El que yo soñé.

París





Me encanta viajar, aunque reconozco que, por razones personales y económicas, no he podido hacerlo todo lo que quisiera. Y cuando viajo, no solo veo unos paisajes o unos edificios. Cuando viajo siento el espíritu del lugar, me enamoro rápido de esos detalles, del olor, del alma propia y particular que tiene cada lugar y sus gentes.
París fué, para mí, con 16 años, una ciudad muy especial. Los pintores de Montmartre, las márgenes del Sena, el bullicio de Pigalle,  el Bois de Boulogne... la recordaré siempre.  La comparación que surge en el libro entre palomas y gorriones en París y en Sevilla, la he vivido, es cierta.
Y su historia. La revolución francesa. ¿Como surgió? ¿Qué quedó de esos sueños de libertad tras la masacre de las guillotinas? Pues sí, algo quedó. Los franceses son un pueblo consciente de su propia fuerza. Saben que pueden modificar la historia con su esfuerzo y sus protestas. Aunque parezca, como el mayo francés de 68, que todo queda en nada, no es así, algo queda.

Días de hielo y fuego



¿Porqué esta novela?
Estando en Santo Domingo, me enseñaron unas muñecas sin rostro, típicas de allí. Dicen que no tienen rostro porque el país es una mezcla tal de razas y mestizajes entre los españoles que llegaron, con los antíguos taínos originarios y con los esclavos africanos, que no hay un solo color, son cada uno de un grado personal de "café con leche", y allí son todos diferentes pero iguales, más claros o más oscuros, dominicanos.
Pero en Haití, su país vecino con el que compraten la isla "La Española", allí son todos oscuros, africanos. ¿Por qué? Pregunté. Haití era la parte francesa, y los franceses no eran muy dados a mezclar sangres, sus esclavos eran solo para ellos, esclavos. Sin embargo, en Santo Domingo, los españoles se unieron a los esclavos y a los nativos, y a partir de ahí todos fueron uno.  En Haití (la antígua Saint Domingue) los esclavos no fueron bien tratados, y se rebelaron contra sus amos franceses pasándolos a cuchillo. En Santo Domingo,
quizás porque ya eran parte de la familia, los trataron mejor.

Haití, cuando los revolucionarios consiguieron el poder, fueron a su vez dominados por cabecillas, que se autoproclamaban emperadores, reyes y dioses y utilizaron durante generaciones el miedo al vudú como arma para mantener el control de los haitianos, imperando una corrupción que lo ha convertido en uno de los países más pobres del mundo.

Es curioso ver las fotos aéreas de la frontera entre Haití y Santo Domingo. La parte española es un vergel de bosques y naturaleza viva. Haití es una superficie desolada, desnuda y seca.

He visto tractores que arrastran en jaulas a decenas de haitianos sin papeles, apiñados para ir a trabajar recogiendo caña de azúcar, a dos dólares la tonelada. La frontera mana de haitianos que acuden a Santo Domingo para conseguir pan para sus hijos. El 80 % de los niños haitianos sufre desnutrición.

Estoy segura de que si hubieran recibido hace dos siglos un trato más humano, el país ahora sería diferente.